democracia como un sistema político mucho mas limitado, casi como una
metodología para la elección de las autoridades nacionales más que como un
sistema republicano, democrático, federal. Entonces, yo tengo la sensación de que
la gente no quiere involucrarse demasiado. Me parece que está mucho más deseosa
de ocuparse de sus propios temas, de sus propias necesidades, de cómo crecer, de
cómo sobrevivir. Entonces, para nada hay una cosa de mirada implícita despectiva,
todo lo contrario, estamos tratando de entender desde qué lugar cultural se está
percibiendo la democracia y que es lo que cada uno le pide a la democracia en
funcion de cómo se la representa. Me da la sensación que el área central esta
mucho menos acuciada en términos económicos y en términos de resolver sus
necesidades, con excepción del gran Buenos Aires, por supuesto, donde hay zonas
de extrema pobreza. Pero, en el resto, puede aparecer una cultura mas matizada,
puede aparecer una representación de la política donde lo lúdico tiene más espacio.
Me da la sensación que en el norte, en la Argentina profunda, esto esta mas
reducido. No se como lo ves vos.
ELI: Si, por eso hablé de una fractura. Lo terrible del termino fractura es que hasta
se puede hablar de una separación, digamos, cuando se rompe una pierna, se la
fractura, quizás con una buena curación se la puede volver a juntar. Si la curación es
mala, uno hasta puede perder la pierna.
EL: Pero aquí estamos cohabitando desde hace muchísimas décadas.
ELI: Si, pero ahora se expresó de una manera mas descarnada esta cohabitación y
esta necesidad de gobernar… y yo me hago la otra pregunta, esta es cualitativa, no
cuantitativa, la presidenta obviamente ganó en su ley, ganó sin fraude como se ha
insinuado, nada de eso, es decir, ganó… nuestras encuestas de boca de urna daban
46%...
EL: Ganó bien.
ELI: Ganó bien, ganó perfecto. Ahora, va a tener que lidiar con gobernadores como
Macri, como Binner, como el propio Scioli y como quizás el propio Schiaretti, es
decir, Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Capital, que no son exactamente un
modelo de gobernador de, llamémosle, el riñón de la presidenta. Son casi opositores
y ex colaboradores, en el caso de Scioli habría que ver, pero sabemos que son
orientaciones y orígenes muy distintos. Quiero decir, va a poder implementar su
gobernabilidad con los gobernadores de las principales provincias - eximo de esto a
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